Siempre hemos vivido en la miseria, y nos acomodaremos a ella por algún tiempo. Pero no olvide que los obreros son los únicos productores de riqueza. Somos nosotros, los obreros, los que hacemos marchar las máquinas en las industrias, los que extraemos el carbón y los minerales de las minas, los que construimos ciudades…¿Por qué no vamos, pues, a construir y aún en mejores condiciones para reemplazar lo destruido? Las ruinas no nos dan miedo. Sabemos que no vamos a heredar nada más que ruinas, porque la burguesía tratará de arruinar el mundo en la última fase de su historia. Pero -le repito- a nosotros no nos dan miedo las ruinas, porque llevamos un mundo nuevo en nuestros corazones. Ese mundo está creciendo en este instante.

B. DURRUTI

miércoles, abril 18, 2012

LA UNIDAD DE ACCIÓN Y LA TRAICIÓN


LA UNIDAD DE ACCIÓN Y LA TRAICIÓN

Ante el grave enfrentamiento interno, la censura, la expulsión de
sindicatos, la purga ideológica, la vulneración de los principios
anarcosindicalistas y la colaboración con organizaciones reformistas,
entre las cuales está la CGT, organización enemiga flagrante del
anarcosindicalismo y de la CNT, me considero en el derecho y en la
obligación de dar mi opinión y hacer algunas observaciones:

La unidad de acción.
La unidad de los trabajadores en la defensa de sus intereses como
clase es siempre positiva, la unidad de acción de las organizaciones
obreras para objetivos concretos, siempre que sea por la base y no
decisiones de comités burocráticos puede ser algo positivo.
Las acciones conjuntas deben hacerse en primer lugar respetando
siempre la autonomía de los sindicatos, nunca puede ser una
imposición. Los acuerdos que podamos llegar con otras organizaciones
no deberían ir nunca contra los acuerdos generales de la organización
y sobre todo que no desvirtúen los principios tácticas y finalidades
dela CNT.
En nuestra labor sindical dentro de la empresa en muchas ocasiones
nos veremos obligados a tratar con otras organizaciones y por muy
reformistas que estas sean, a veces nos veremos en la necesidad de
llegar algún tipo de acuerdo y coordinar algún tipo de acciones
conjuntas para lograr las reivindicaciones laborales y sociales de los
trabajadores, donde sería negativo tanto como para los trabajadores
como para la CNT, la inhibición o la automarginación en tales
conflictos, en estos casos habrá que tener en cuenta ciertas
consideraciones: los acuerdos de CNT se deciden por las asambleas del
sindicato. Los afiliados de la CNT no deben diluirse en la asamblea de
la empresa, sino que deberían actuar siempre organizadamente, y en
las empresas que las circunstancias lo permitan, nos organizaremos en
secciones sindicales.
Nuestra actuación en la empresa debería ir siempre más allá de la
lucha por las mejoras salariales y laborales, deben de estar
impregnadas de nuestras ideas anarquistas, por lo que debemos de
rehuir de cualquier reivindicación corporativa o que implique algún
tipo de discriminación o atente contra nuestros principios de igualdad
y justicia. Tenemos que visualizar que el anarcosindicalismo es otra
forma de hacer sindicalismo, que no sólo luchamos por cuestiones
únicamente laborales, sino que sobre todo, debemos pretender
crear una conciencia de clase, la superación cultural y moral de los
trabajadores y de todos los seres humanos en general.
Los foros y plataformas por lo general son, reuniones de carácter
político, que suelen representar a vanguardias y comités de
organizaciones políticas o sindicales que en realidad no cuentan con
las bases de esas organizaciones y con poca o ninguna vinculación real
con la clase obrera, que su único fin es utilizar estas plataformas como
altavoz y medio de proyección pública para sus aspiraciones políticas
y de poder.
Por otro lado, tampoco es conveniente propugnar el hermetismo, ni
aislamiento, si queremos transformar la sociedad no podemos
aislarnos de ella, necesitamos el contacto con los trabajadores, pero sin
ocultar nunca nuestras convicciones y siendo siempre coherentes con
las mismas.

CGT y la traición reformista.

Las acciones conjunta o colaboración con la CGT debe tener un
tratamiento distinto y específico al de otras organizaciones, debido al
origen, práctica y fines de esta organización.
No es posible unir o sumar esfuerzos entre opciones u organizaciones
totalmente opuestas, porque cuando dos cosas son contrarias una a la
otra, se repelerán o bien se anularán mutuamente; pero si dos
organizaciones opuestas se unen, es porque una de ellas estará
dominada por la otra o por que ha dejado ser, lo que originariamente
era, ha perdido su esencia, que le hacía diferente y por tanto contraía
a la fuerza opuesta.
Al igual que el aceite y el agua no se pueden mesclar en tanto y cuanto
ambas sustancias conserven íntegramente su propia naturaleza, y por
lo tanto dejen de ser lo que son.
Es de todos conocidos el origen de la CGT, esta organización nacida de
escisiones de CNT. Para poder entender bien la situación actual de la
CNT y sus diferencias con la CGT es necesario al menos hacer un
breve resumen histórico de los acontecimientos que nos ha llevado a la
situación actual: desde los últimos momentos de la dictadura
franquista y comienzos de la transición a la democracia y la
legalización de la CNT, desde las instituciones del estado se fue
tomando contacto con todas las organizaciones políticas y sindicales
de este país en aras de conseguir una transición tranquila, sin grandes
sobresaltos ni conflictos sociales, para lo que era necesario conseguir
la colaboración e integración de todas las organizaciones políticas y
sindicales, estos contactos hizo posible que en 1977 se firmasen los
famosos Pactos de la Moncloa, por el cual se garantizaba la paz social
y el sometimiento de la clase obrera, a cambio de grandes privilegios y
apoyo económico a las organizaciones firmantes. CCOO y UGT que
firmaron dicho pacto, recibieron ingentes cantidades de dinero público
y cobertura institucional para convertirse en los únicos interlocutores
válidos, en los únicos representantes con capacidad y reconocimiento
del estado para negociar en nombre de todos los trabajadores. Estas
organizaciones no tardaron en convertirse en los mejores
apaciguadores de los conflictos sociales, en freno de la lucha obrera y
adormecedores de la conciencia de clase, lo que permitió pasar a la
democracia burguesa sin romper con la dictadura franquista, aprobar
una constitución que garantizara todos los privilegios de las clases
dominantes y de la iglesia católica, también garantizar la propiedad
privada y la economía de libre mercado, como principio fundamental
de la nueva sociedad democrática e imponernos como régimen político
la monarquía parlamentaria.
La única organización sindical que no firmó los pactos y que rechazó
de plano la participación en el juego institucional fue la CNT, que fiel
a sus principios, se negó cualquier negociación con el estado y se opuso
a las elecciones sindicales a Comités de Empresa.
La intransigencia de la CNT ante las pretensiones del estado y de la
patronal trajo como consecuencia inmediata la represión, la
marginación, el intento de destruirla por todos los medios posibles;
uno se esos primeros golpes que recibió la CNT fue el Caso Escala:
una sala de fiesta de Barcelona que sufrió un incendio en el que
murieron varios trabajadores, se acusó a varios compañeros que
pasaron varios años en la cárcel, todas las evidencias pusieron de
manifiesto que se trataba de un montaje policial organizado por un tal
Gambín, conocido confidente policial, y aunque la CNT no tuvo
absolutamente nada que ver con aquel suceso, no obstante se resintió
fuertemente la afiliación, como consecuencia de una campaña de
desacreditación perfectamente orquestada desde el estado.

Primera escisión reformista:

Mucho peor que los montajes policiales fue la infiltración marxista y
el reformismo, que con el apoyo del Estado, desde un comienzo no
tardaron en crear una estructuras paralelas que conspiraban desde
dentro contra la propia CNT, en su estrategia de control de la
organización fueron copando los Comités Regionales y el Comité
Nacional, pero una vez al descubierto muchos fueron expulsados de la
organización.
El V Congreso de la CNT celebrado en la Casa de Campo de Madrid
entre el 8 y el 16 de diciembre de 1979, ratificó los principios tácticas y
finalidades dela CNT y rechazó la participación en las elecciones
sindicales a comités de empresas por considerar que eso significaba
trasladar el parlamentarismo burgués a la empresa y por lo tanto
contrario a nuestros principios de acción directa y de autogestión.
En este congreso se puso de manifiesto la división interna y el juego
sucio de los reformistas, que no estaban dispuesto a aceptar la
voluntad de la mayoría, de 420 sindicatos representados y más de 700
delegados, 52 de los cuales disconformes con los acuerdos sobre la no
participación en elecciones sindicales y comités de empresas,
abandonaron el congreso y constituyeron en un principio lo que
denominaron Comisión Impugnadora.
Uno de los principales promotores de esta escisión fue el que había
sido SG de CNT hasta el congreso: Enrique Marcos, que con otros
reformistas e infiltrados de varias tendencias: cristianos, marxistas
etc. Hacía tiempo que tramaban contra la CNT; Enrique Marcos con
el tiempo paso a la CGT sin apenas protagonismo, pero en 2005 este
impresentable personaje volvió a salir a la palestra, siendo noticia en
la prensa de tirada nacional e internacional, por inventarse un pasado
como prisionero en los campos de concentración nazis, llegando a
presidir una importante organización de víctimas del nazismo, pero al
final se demostró que todo era mentira, nunca había estado
prisionero, resultó ser un falsante, como ya lo había demostrado con
anterioridad cuando fue SG de la CNT.
Este sector reformista, convocaron un congreso en Valencia entre los
días del 25 al 27 de julio de 1980, donde se posicionaron a favor de las
elecciones sindicales y los comités de empresa y a partir de ese
momento pasaron a denominarse CNT – Congreso de Valencia. La
CNT se vio obligada a entablar una lucha contra la usurpación de
siglas, los escisionistas por su parte se dedicaron a legalizar sindicatos
inexistente por toda España, muchos los cuales se legalizaban con
mismos nombres en distintas localidades. Desde un principio contaron
con el apoyo jurídico y mediático del estado, pero a pesar de ello no
consiguieron la proyección que esperaban y empezaron a decaer.
Pero la CNT inmersa en la lucha por las siglas se vio envuelta en una
nueva lucha interna motivada esta vez por una nueva traición:
encabezada por el que en ese momento era Secretario General, José
Bondía, que mantuvo una reunión secreta con Alfonso Guerra, con
quien negoció una oferta de compra de la CNT. Poco tiempo antes del
sexto congreso se manifestaba públicamente a favor de la
participación en las elecciones sindicales, noticia que casualmente se
hizo eco toda la prensa burguesa.
Precedido de un fuerte enfrentamiento se celebró el VI Congreso del
12 al 16 de enero de 1983 en Barcelona, y aunque la gestión de Bondía
fue aprobada, sobre el punto más polémico, que era: la acción sindical
en la empresa, en este punto, fue donde algunos sindicatos pretendían
incluir la participación en las elecciones sindicales a Comités de
Empresa, pero a pesar de la estrategia de manipulación de muchos
comités de la organización, copados por la trama reformista, no hubo
manera de llegar a ningún acuerdo y se decidió finalmente, dejarlo
para un posterior congreso monográfico. Al finalizar el VI Congreso
salió elegido como nuevo Secretario General, el candidato del sector
reformista: Antonio Pérez Canales, del Sindicato de Oficios Varios de
Córdoba.
El Congreso Monográfico celebró en Torrejón de Ardoz del 31 de
marzo al 3 de abril de 1983, en dicho congreso por una amplia
mayoría se volvió a ratificar los principios anarcosindicalistas y las
tácticas tradicionales de la CNT, de acción directa y autogestión y por
tanto, se rechazó la participación a las elecciones sindicales y los
comités de empresa.
La culminación del Congreso Monográfico, aunque aclaró un poco la
situación interna, para nada supuso el final de las maquinaciones de
los reformistas que no estaban dispuesto a aceptar los acuerdos del
congreso y desde el primer momento mantuvieron contactos con la
escisión del V Congreso, o más bien intensificaron los contactos que
desde hacía tiempo venían manteniendo.
El SP que residía en Madrid, con Antonio Pérez como SG; y desde su
elección en VI congreso no paró ni un sólo momento de conspirar
contra la CNT, de hecho la prensa burguesa que por lo general suele
silenciar todas las actividades de la CNT, en este caso, dio una amplia
difusión a todas las declaraciones de Antonio Pérez y del sector
reformista que representaba, a favor de la participación en las
elecciones sindicales, presentándose como los renovadores del
anarcosindicalismo, tachando a los verdaderos anarcosindicalistas de
inmovilista y dogmáticos, crearon una situación insostenible motivo
por el cual la organización no tubo más remedio que destituir al SG y
elegir un nuevo SP. En un Pleno Nacional celebrado en julio de 1983 se
nombró un nuevo Secretariado Permanente del Comité Nacional y
se eligió al compañero Fernando Montero, como secretario general de
la CNT y a la FL de Madrid como sede del SP.
Se abrió un periodo de enfrentamiento contra la feroz conspiración
interna que aún permanecía dentro de la organización y que ahora
actuaban conjuntamente con los escindidos en el V Congreso.
Como respuesta de autodefensa la organización desfederó a varios
sindicatos que actuaban contra la CNT y algunos de los más
destacados reformistas, entre los cuales fueron expulsados: José
Bondía y Antonio Pérez, estos crearon una nueva escisión que al poco
tiempo se unió a la del V Congreso, autodenominada hasta ese
momento como: CNT congreso de Valencia.
La escisión del V congreso junto con los reformistas expulsados a
partir del VI congreso y el Monográfico se reunieron para celebrar un
falso congreso de reunificación. Del 29 de junio al 1 de julio de 1984 se
celebró en el Palacio de Congreso de Madrid, un congreso al que
llamaron de Unificación o Reunificación, que presentaron ante la
opinión pública como la unificación de CNT, usurpando de manera
totalmente ilegítima nuestras siglas y despreciando absolutamente lo
que había decidido por amplia mayoría la CNT. Este congreso tuvo un
amplio apoyo mediático y gubernamental, el falso congreso estuvo en
todo momento custodiado por un gran dispositivo policial que
impedían el paso a todo aquel que no estuvieran autorizado por los
sindicatos reformistas. Frente al lugar de celebración del congreso de
la falsa reunificación, se concentraron varios cientos de cenetistas que
no estaban dispuesto a tolerar aquella farsa y fueron violentamente
reprimidos por el fuerte cordón policial que custodiaba aquel montaje.
Ante la cada vez más flagrante usurpación de siglas, la CNT decidió
actuar jurídicamente contra los usurpadores, “ aunque como se vería
con el tiempo, esto entrañaba un gran riesgo, pues significaba poner
en manos de la justicia burguesa la propiedad de las siglas CNT”. El
juicio por la siglas fue un duro varapalo para la organización, pues de
manera increíble perdimos en primera instancia el juicio, a pesar de
que la sentencia apoyaba casi todos nuestros planteamientos
reconociendo una serie de hechos que nos daba la razón,
increíblemente en la resolución final le da la razón a la parte
contraria, ante semejante injusticia y aberración jurídica, la CNT se
vio obligada a recurrir al Tribunal Supremo.
En marzo de 1989, ante la tremenda contradicción entre la
argumentación y el fallo de la sentencia, el Tribunal Supremo se vio
obligado a darnos la razón devolviendo la propiedad de las siglas a
quienes legítimamente les correspondía.
Entre tanto, el gobierno que daba por hecho que perderíamos el juicio
por las siglas, para apoyar la opción reformista, adelantó 240 millones
de pesetas en concepto de devolución de nuestro patrimonio histórico,
pero dicho fondo no pudieron cobrarlos, porque los tribunales
decidieron que quedaran bloqueados hasta que no se dilucidara
definitivamente la propiedad de las siglas.
En ese mismo año de 1989 la escisión celebra un congreso en el que,
forzados por la decisión del Tribunal Supremo pasan a denominarse
CGT, pero no obstante continuaron, y siguen en la actualidad
usurpando nuestros símbolos y nuestra historia, de la que se reclaman
herederos, de hecho aún siguen reclamando nuestro patrimonio y nos
tienen planteados algunos pleitos sin ninguna base jurídica ni moral.
Aunque algunos puedan creer que nuestra única diferencia era, o es lo
de la elecciones sindicales, nada más lejos de la realidad, nuestra
diferencias irreconciliables son mucho más amplias y profundas:
La fundamental es el abandono de los principios anarquistas que
inspiran a la CNT, la participación en comités de empresa que son
estructuras jerárquicas y anti-obreras, que reproducen el
parlamentarismo burgués, donde unos pocos deciden por la mayoría.
Las elecciones sindicales entraña los mismos vicios que las elecciones
políticas, limitado al ámbito de la empresa, pero además les da una
falsa legitimidad a las grandes centrales sindicales institucionalizadas
para pactar en nombre de todos los trabajadores, con las excusa de la
representatividad, que es el mismo argumento que utilizan los
políticos par imponernos todo tipo de recortes sociales.
Los liberados son unos privilegiados con respecto al resto de los
trabajadores, que lleva al sindicalismo hacia la profesionalización, a
convertirse en gestoras laborales carentes de los necesarios principios
de transformación social.
Las subvenciones que reciben todas las organizaciones sindicales,
excepto la CNT, también las recibe la CGT, no se puede ir contra el
estado y al mismo tiempo comer de su mano, esto significa venderse,
prostituirse, nadie muerde la mano que le da de comer . Una
organización que aspire a la transformación social, a la destrucción
del estado y la instauración de una sociedad comunista libertaria, no
puede aceptar subvenciones del quien teóricamente es su mayor
enemigo.
En su deriva reformista la CGT ha ido adquiriendo cada vez más las
características de las organizaciones burguesas autoritarias,
integradas en el sistema capitalista con una estructura cada día más
jerarquizada y ejecutivista, han afiliado a miembros del los cuerpos
represivos, miembros de partidos políticos ocupan cargos y utilizan el
sindicato para sus fines políticos y de lucha por el poder.
La CGT usurpa la simbología y la historia anarcosindicalista, aunque
la realidad es que se escindieron de CNT por que renunciaron al
anarcosindicalismo y a las ideas anarquistas que lo inspiran, si siguen
reclamándose anarcosindicalista es para presentarse ante los
trabajadores con una imagen distinta a la del sindicalismo páctista e
institucional, un modelo sindical del que forman parte, el mismo
modelo de sindicalismo de CCOO Y UGT, pero ese espacio en el que se
desenvuelven, ya está ocupado y liderado por estas organizaciones,
que son los principales representantes del sindicalismo
institucionalizado, las otras centrales minoritarias, que también
participan del circo de las elecciones sindicales y de las subvenciones
del estado, tampoco se puede decir que sean muy distintas.
La CGT usa la estética anarcosindicalista como un disfraz, como algo
cosmético, pero en el fondo, tanto su acción práctica como su
finalidad, no es otra que la desvirtuación del anarcosindicalismio y la
destrucción de la CNT.
Los elementos reformistas siempre han tratado de desprestigiar a los
verdaderamente son anarcosindicalistas, acusándolos de estar
dirigidos por alguna organización interna o externa a CNT, de hecho
ha sido muy frecuente usar como pretexto en su estrategia difamatoria
y de manipulación, acusar al exilio confederal o a la FAI de dirigir a la
CNT, para que se mantuviera en una postura de inmovilista,
dogmática e intransigente o purista.
El sectarismo reformistas siempre ha sido intransigente y no ha
tenido reparos en utilizar cualquier medio para conseguir sus fines.
Y aunque el reformismo se presenta siempre como una novedad
siempre repite los mismos anacrónicos y desgastados argumentos: la
renovación, la apertura, el anti-imovilismo, el pragmatismo y el
oportunismo, eso sí, siempre adornado con una envoltura
aparentemente innovadora.

La desfederación de Levante.

Cuando parecía que por fin la CNT se había desembarazado de todas
de las conspiraciones internas y traumas del pasado, cuando
espesábamos a encarar le futuro con optimismo y todo hacia presagiar
un futuro armónico y de expansión del anarcosindicalismo; resultó
que volvieron a aparecer negras tormentas en el horizonte de la
Confederación.
La desfederación de la Regional de Levante fue un capítulo más de
esta historia tristemente interminable: sin entrar en demasiados
detalles, esta historia se resume, en que por una serie de diferencias e
incumplimientos, la Regional de Levante se vio obligada a la
desfederación del SOV de Valencia.
Esto fue aprovechado por otro complot reformista que desde hacía
tiempo actuá más o menos oculto, en el interior de la CNT y desde
otras regionales y sindicatos no pertenecientes a Levante, atacaron a
dicha regional con todo tipo de falsedades y manipulaciones hasta
propiciar su desfederación. Esta lucha interna que comenzó en 2002
duró más de cuatro años, durante los cuales se les hizo pasar a los
compañeros de dicha regional un vía crucis insoportable, fue unos de
los capítulos más lamentables y más sucios en toda la historia de la
CNT.
Un tema que podía haber quedado resuelto rápidamente en el ámbito
regional, acabó en una guerra sucia en la que el primer objetivo, no
reconocido pero evidente, era desfederar a la Regional de Levante,
costara lo que costara, en esta guerra se derrochó falsedad e
hipocresía hasta límites inimaginables, por los mismos motivos y los
mismo protagonistas que ahora acaban de desfederar al SOV de
Cádiz, estos motivos entre otros son: controlar a la CNT y desviarla de
su trayectoria anarcosindicalista, llevarla hacia posiciones reformistas
y menos intransigentes, al mismo tiempo propiciar un acercamiento a
CGT, teniendo como horizonte una futura fusión, para lo cual
necesitan anular o eliminar todos los obstáculos que encuentren en el
camino.
Aunque afortunadamente al final no lograron su propósito de
desfederar a Levante, si lograron que algunos compañeros se
marcharan hartos y asqueados de tanta falsedad y tanta bazofia.


La ley de la mayoria y el voto.

La democracia burguesa es un invento del capitalismo para legitimar
los privilegios dela clase dominante y al mismo tiempo justificar las
desigualdades y las injusticias sociales; es un sistema político en el que
teóricamente es el pueblo quien gobierna, pero que en la práctica,
quienes tienen el poder económico son, quienes tienen el poder
político.
En la democracia directa es la participación de todos en las toma de
decisiones de forma asamblearia y en igualdad de condiciones, pero
incluso en esta forma más justa y verdadera de la democracia, no
todas las decisiones por muy mayoritarias que sean, son justas ni
representan siempre la verdad.
Posiblemente una mayoría de personas creen que la existencia de Dios
es una realidad incuestionable, pero el porcentaje de quienes creen que
algo es de una determinada manera o de otra, no hace que esto sea
más justo o más real, solamente el tiempo, el conocimiento empírico y
científico quita y da razones y nos va acercando progresivamente
hacia la verdad, porque la realidad de las cosas, no están sujetas a las
leyes de la mayorías ni de las minorías.
Hubo un tiempo en la historia en el que se creía que el mundo era
plano y la tierra era el centro del universo, y los pocos que se
atrevieron a cuestionarlo fueron terriblemente reprimidos, porque
cuestionaban los dogmas y las creencias religiosas de la época y el
poder omnipotente de la Iglesia Católica, porque cuestionar la verdad
oficial, siempre se ha interpretado como un desafío al poder
establecido.
Es verdad que cuando no hay más remedio que tomar decisiones y no
sea posible llegar a un consenso, lo más justo y práctico es, que las
decisiones se tomen por mayorías, aunque estas puedan en ocasiones
ser erróneas. Pero cuando de lo que se trata es de vencer y no de
convencer, el voto se puede convertir en un instrumento
absolutamente perverso.
Independientemente de que las opiniones puede ser manipulables,
sobre todo por parte de quienes administran la información; el voto a
veces, puede que ni siquiera represente a la mayoría, porque puede
estar sujeto a la manipulación y al fraude, sobre todo cuando existen
estructuras de poder, porque el poder nunca busca la verdad ni la
justicia, sino el privilegio, el mantenimiento de ese poder a toda costa,
aunque tenga que recurrir siempre al perverso principio, de que el fin
justifica los medios.

Irregularidades en la Regional Andaluza.

En la regional Andaluza de la CNT se ha cometido una serie de
irregularidades que cuestionan el voto y la supuestas mayorías que en
muchas ocasiones han sido obtenidas de manera fraudulenta y al
mismo tiempo se han vulnerado todos los principios tácticas y
finalidades de la CNT.
Las irregularidades cometidas en la Regional Andaluza son
innumerables, la mayoría de ellas cometida por los sindicatos de la
Federación Local de Sevilla, con la complicidad de otros sindicatos de
la regional, y todo pone de manifiesto que también cuenta con la
complicidad o el apoyo de sindicatos y militantes de otras regionales.
De de todas las irregularidades las más graves son: la participación en
las elecciones sindicales y comités de empresas, para lo cual crearon y
financiaron sindicatos paralelos, SAC, (Sindicato Andaluz de
Conductores), sindicato creado y financiado desde CNT de Sevilla,
para que sirviera de tapadera para encubrir la participación en las
elecciones sindicales, algo que quedó absolutamente confirmado por la
comisión de investigación nombrada al efecto y que la mayoría de
sindicatos sancionaron, con la inhabilitación de algunos de los
responsables; pero gracias a la complicidad de algunos sindicatos y a
la connivencia del SP del CR, la inhabilitación de éstos, fue un paripé
para dar por terminado el asunto sin llegar al fondo de la cuestión ni
depurar todas las responsabilidades, una prueba de ello fue que al
poco tiempo todos los inhabilitados por este y otros motivos, fueron
rehabilitados, gracias a la complicidad de varios sindicatos de la
regional y la compra de votos que seguía operando. En el mismo Pleno
que fueron exculpados todos los sancionados, de paso también se
rehabilitó a otro afilado de Sevilla expulsado en el 2002, por doble
afiliación y presentarse a las elecciones sindicales y ser miembro del
un comité de empresa, en representación de CCOO, estando afilado al
mismo tiempo a la CNT.
Quizás la irregularidad más grave, ha sido y es, la compra de votos:
varios sindicatos de la F L de Sevilla cotizaban muy por encima de su
afiliación real, para obtener más votos en los Plenos Regionales, esto
ha sido y sigue siendo una práctica habitual en la FL de Sevilla, y en
la Regional Andaluza, de hecho recientemente, la CNT de Cádiz volvió
a denunciar una otra irregularidad no detectada con anterioridad,
aunque se viene produciendo desde años atrás, entre 2008 y 2011 el
Secretariado Permanente del Comité Regional Andaluza ha estado
cotizando muy por encima de la afiliación real de la regional como
evidencia los informes de tesorería y cotización del Comité Regional;
esta cotización irregular ha permitido a la Regional Andaluza tener
más votos de los que le correspondía en los Plenos Nacionales,
precisamente en momentos cruciales previos a la celebración del X
Congreso y ha podido alterar la voluntad mayoritaria de los
sindicatos. Este fraude vulnera la normativa orgánica y los principios
esenciales de la CNT, de horizontalidad, solidaridad y federalismo.
No sólo se cotizaba por encima de la afiliación real, sino que
constituyeron sindicatos de ramos que no tenían la afiliación suficiente
para constituirse como tales, como el caso del Sindicato de Limpieza
de Sevilla, cuyos acuerdos los redactaba directamente, el secretario
general de sindicato de transporte sin que mediara ningún tipo de
asamblea.

Desfederación del SOV de Motril.

Muchos sindicatos de la regional llevan años denunciando todas la
irregularidades, uno estos es el Sindicato Oficios Varios de Motril que
fue desfederado de manera totalmente arbitraria e inorgánica por
denunciar lo mismo que denunciaron otros sindicatos.
Se le expulsó por acusación sin prueba, cuando en realidad las
pruebas era abrumadoras y muchas de ellas habían sido reconocidas
como tales, por los mismos que votaron a favor de su desfederación, en
un alarde de hipocresía sin límites y con el rodillo de votos comprados
o fraudulentos.

Desfederación del SOV de Cádiz.

En pleno regional del pasado 15 de octubre de 2011 se acordó la
desfederación del SOV de Cádiz, a propuesta del SOV de Lebrija, por
acusaciones sin prueba a la Regional Andaluza y al Secretariado
Permanente del Comité Regional y a sindicatos de la regional;
también se acuerda la imposibilidad de que sus afiliados se puedan
afiliarse a otros sindicatos de la CNT.
La supuesta acusación sin pruebas ha sido, que en la Regional
Andaluza existía compra de votos.
Tanto el SOV de Córdoba, como el SOV de Pedrera, mediante escritos
tramitados a toda la CNT han intentado justificar lo injustificable, en
un alarde de tergiversación y de malabarismo aritmético han
intentado hacernos creer que habían hallado la la cuadratura del
círculo, al mismo tiempo que nos tomaban por tontos a todos los
anarcosindicalistas.
Pero por muchos votos que la avalen: una mentira nunca será una
verdad.
Que la Regional Andaluza ha cotizado muy por encima de su afiliación
real, no es una acusación, es la constatación de un hecho irrefutable,
que ha quedado absolutamente demostrado de manera fehaciente,
algo que no está sujeto a interpretaciones subjetivas, sino que es,
claramente cuantificable y comprobable, según los informes de
tesorería y de cotización realizados por los mismos que ahora niegan
la evidencia.
Esta cotización fraudulenta ha permitido que la Regional Andaluza
votara con más votos de los que le correspondía en los Plenos
Nacionales, plenos que fueron decisivos para el X Congreso. Cádiz no
ha realizado acusaciones sin pruebas, todo lo contrario, lo que ha
afirmado es rigurosamente cierto. Aunque el SP del CR con la
complicidad de algunos sindicatos han intentado silenciar todas las
irregularidades y versionar de manera retorcida los hechos.
En el Pleno Regional de Andalucía del 17 de marzo de 2012 se volvió a
ratificar la desfederación del SOV de Cádiz al rechazar el recurso
presentado por Cádiz en su defensa. Sobre dicho acuerdo es necesario
hacer algunas aclaraciones, primero que ha a la CNT de Cádiz se le ha
puesto todas las trabas posibles para que sus argumentos no sean
conocidos por los sindicatos y la militancia de la organización, se ha
retrasado la tramitación orgánica del recurso y una vez que se ha
tramitado, se ha hecho de manera que la mayoría de los sindicatos no
pudieran abrir el documento, porque el SP del CR de Andalucía le
había añadidos otros documento no tramitados por Cádiz.
Otra cuestión a tener en consideración es, como se toma dicho
acuerdo, de los más de treinta sindicatos que tiene la Regional
Andaluza, sólo asisten al pleno regional ocho sindicatos, y de esos
ochos, dos no votaron, por lo que el acuerdo fue tomado finalmente
por seis . La mayoría de sindicatos hace tiempo que dejaron de asistir
a los plenos regionales, asqueados por la tremenda corrupción que
impera en dicha regional.
La CNT de Cádiz lleva funcionando cerca de cuarenta años sin
interrupción, durante los cuales ha ejercido una actividad sindical,
cultural y social incesante. Si algo ha caracterizado siempre a este
sindicato, ha sido su respeto por la normativa orgánica y sobre todo,
por el respeto a los principios tácticas y finalidades del
anarcosindicalismo, y aunque parezca paradójico es precisamente esta
actitud de defensa a ultranza de los principios tácticas y finalidades de
la CNT, ha sido determinante a la hora de aprobar su desfederación.
El SOV de Cádiz lo único que ha hecho es poner en conocimiento de la
organización, esta y otras irregularidades y en vez de investigarlas,
subsanar los errores y exigir las pertinentes responsabilidades; por lo
que se ha optado es, por matar al mensajero.
El SOV de Cádiz no es el único sindicato de la regional que ha
denunciado la compra votos, prácticamente la mitad de los sindicatos
andaluces han denunciado lo mismo y en los mismos términos, algunos
sindicatos de otras regionales también han apoyado esas afirmaciones,
entonces, ¿ por qué sólo se desfedera a Cádiz, cuando son muchos los
que afirman lo mismo?, no será porque parecería demasiado
alarmante una desfederación en masa, o porque tienen un calendario
de desfederaciones preestablecido, un guión bien planificado por el
que guiarse.
La desfederación de Cádiz, es inorgánica, injusta e inmoral y pone de
manifiesto que la situación de la Regional Andaluza lejos estar
resuelta, se complica cada día más, que esta regional está sumergida
en la corrupción más absoluta, una situación de la que difícilmente
podrá salir.
El acuerdo de desfederación es un fiel reflejo de la degradación moral
e ideológica en la que está inmersa la Regional Andaluza y por ende
toda la CNT. Un aspecto del acuerdo de desfederación, es la
imposibilidad de que sus afiliados puedan afiliarse a otros sindicatos
de la CNT, ¿puede haber algo más autoritario?. No se dice ni se sabe
sus nombres, ni de el grado de participación en el supuesto delito del
sindicato al que están afilados, no se les juzga individualmente, ni se
les da la posibilidad de defenderse individualmente, sino que se les
expulsa en bloque, sin saber ni siquiera quienes son, ni de que se les
acusa en concreto a cada uno. Expulsar a un afiliado sin darle el
derecho a defenderse no solamente es inorgánico, sino que está muy
lejos de lo que debe ser práctica y la ética libertaria, incluso se puede
afirmar que está muy por debajo de los derechos reconocidos por la
justicia burguesa, y es un fiel reflejo del carácter autoritario e
inquisitorial de quienes han tomado tan injusta decisión.
La realidad de las cosas es que al SOV de Cádiz se le expulsado por
motivos ideológicos, y que las acusaciones que se le imputan es sólo un
pretexto. Esta es la tercera vez que se pide su desfederación, pero
ahora se ha aprobado gracias a la censura a la manipulación y a los
votos fraudulentos.

Intento de desfederación de la FL de Madrid.

En linea con el proceso de desfederaciones, destrucción y
desvirtuación de la CNT, el SOV de Valladolid pidió la desfederación
de la FL de Madrid, con la escusa de que algunos compañeros de dicha
FL se manifestaron en contra de la manifestación conjunta con otras
organizaciones, entre las cuales estaba la CGT, el día 29 de septiembre
de 2011. Aunque la manifestación fuera una convocatoria a nivel
nacional, se hizo en Madrid cuya FL no estaba conforme y por tanto
no se respetó su autonomía. Resulta sorprendente que el SOV de
Valladolid se desgarre las vestiduras y pida responsabilidades por lo
que considera una irregularidad imperdonable y sin embargo no diga
una palabra de las graves irregularidades que existen en Andalucía,
parece como si padecieran algún tipo de amnesia selectiva que sólo les
permiten ver lo que quieren.

Compañeros:

Mucho me temo que a tenor del desarrollo de los acontecimientos, que
la CNT va encaminada hacia un progresivo abandono de los principios
anarcosindicalistas que le son inherentes, hacia una deriva reformista
que amenaza en convertirla en una pieza más del sistema capitalista.
No se trata sólo de la confrontación de ideas, pues al fin y al cabo, cada
uno, debería de tener el derecho pensar lo que quiera y exponerlo
libremente, se trata simple y llanamente, de corrupción e impunidad.
Pero tristemente hay que reconocer que el mayor problema no es la
corrupción, el mayor problema es la pasividad y la tolerancia de
algunos sindicatos y muchos militantes y afiliados, que se consideran
anarcosindicalistas y lógicamente, enemigos del fraude y de la
corrupción, pero que hacen poco o nada por salir de esta terrible
situación.
Como se pude pretender transformar la sociedad si no somos capaces
ni de resolver los problemas internos, si ignoramos o no hacemos nada
por zafarnos del lastre reformista que amenaza con hundirnos
definitivamente.
Una organización para que exista como tal, tiene que tener una
ideología clara, unos principios básicos por los que guiarse, una
normativa orgánica coherente con esos principios, y una práctica que
respete los principios y la normativa; estas premisas no se están
dando en estos actualmente en la CNT, por lo tanto, está condenada a
la desintegración como organización anarcosindicalista, de no poner
remedio cuanto antes a esta lamentable situación.
Compañeros, por muy duro que nos parezca no podemos ignorar la
realidad de las cosas, y la realidad es, que actualmente la CNT está
dominada por una trama reformista y corrupta, que mediante la
manipulación y el fraude lleva años copando casi todos los cargos y
comités de la organización.
No podemos permanecer impasibles mientras se expulsan a honestos
compañeros y se desfederan a sindicatos fieles a los ideales
anarcosindicalistas, después de décadas o toda una vida dedicada a la
organización.
No podemos aceptar la ley del silencio impuesta por el temor a que
caiga sobre nosotros como la Espada de Damocles, lo de la acusación
sin pruebas, causa por la cual estás inevitablemente sentenciado al
destierro confederal.
Todos sabemos o deberíamos saber, que en la actualidad en la CNT las
pruebas ni la razón carecen de ningún valor, que aquí lo único que
cuentan son los votos, y los votos se compran y se venden como
churros, hasta el momento no hay nada que demuestre que la
cotización de un sindicato o de una federación local o regional se
corresponda con la afiliación real.
Muchos de los acuerdos que toma la CNT en la actualidad, carecen de
ningún valor moral, porque son injustos, contrarios a los principios
anarcosindicalistas y por que no representan la verdadera voluntad
mayoritaria de los afiliados.
Compañeros, asumamos nuestra responsabilidad y acabemos de una
vez por todas, con esta tomadura de pelo, con esta conspiración
reformista, corrupta e inmoral que nos domina. Sin dogmatismo, pero
con dignidad y coraje, con la firme convicción y la ilusión del que sabe
que le asiste la razón y la verdad.

Salud y Anarquía

Horizonte Libertario>